Thursday, December 14, 2006
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Serpientes y Escaleras
Salvador García Soto
El Universal
Jueves 14 de diciembre de 2006
¿Quién mató al primo del Presidente?
Si fue obra del azar, es una casualidad macabra; si fue algo más ya veremos si se puede saber con las investigaciones, pero por ahora la ironía y la paradoja rodean al crimen del pariente de la familia presidencial, Felipe Zavala McGregor . La ejecución a mansalva del primo de la esposa de Felipe Calderón se produjo justo cuando el Presidente ha hecho del combate al crimen organizado y a la violencia, la mayor bandera del arranque de su sexenio.
De hecho, ayer, cuando a Calderón le dieron la noticia de que habían encontrado el cuerpo sin vida de su primo político, acababa de pronunciar un discurso en Huehuetoca, estado de México, donde volvió a advertir que su gobierno no dudará en aplicar "toda la fuerza del Estado" contra los criminales. El rostro del mandatario no pudo evitar una expresión de azoro cuando le comunicaron de la ejecución.
Al enterarse del asesinato, el primer mandatario estaba flanqueado por el secretario de Defensa, Guillermo Galván, por el de la Marina, Mariano Francisco Saynes, y por el titular de la PGR, Eduardo Medina Mora. Acababan de anunciar que 10 mil militares fueron transferidos a la Policía Federal Preventiva para reforzar el combate a la inseguridad y a la criminalidad, y apenas unas horas antes, Felipe Zavala era ejecutado por sus homicidas.
Anoche, en la Procuraduría de Justicia del Estado de México habían descartado el robo o, incluso, el secuestro como móvil del crimen. Zavala McGregor distribuía gas a hoteles en la zona de Naucalpan y Tlalnepantla. Las primeras declaraciones de sus familiares negaban que tuviera enemigos, o que estuviera involucrado en conflictos de cualquier tipo.
En las primeras indagatorias, el subprocurador mexiquense Carlos Flores confirmó la ejecución: el cuerpo de Felipe Zavala estaba arrodillado, en la parte trasera de su camioneta, con tres balazos de un arma calibre 9 milímetros. No desaparecieron pertenencias de valor, ni hubo avisos de secuestro.
No es común en este país de larga tradición presidencialista, que un pariente tan cercano a la familia que habita en Los Pinos, aparezca ejecutado. Las indagatorias dirán si el crimen tiene conexión política, o si el primo político del presidente Calderón fue una más de las miles de víctimas que todos los días ejecuta la delincuencia en este país.
Por ahora, hay detalles de este caso que nos recuerda a otro asesinato reciente y ligado a otro apellido presidencial: el de Enrique Salinas de Gortari, también asesinado y su cuerpo abandonado en un municipio del estado de México. Aquel crimen, ocurrido el 6 de diciembre de 2004, también fue investigado por la PGJEM. Hasta la fecha no han concluido las investigaciones y es claro que la decisión fue, desde el principio, borrar evidencias y ocultar la verdad sobre ese crimen.
Veremos si con el asesinato del primo de Margarita Zavala no estamos ante un caso que terminará también enredado y sin esclarecerse. Si fue un crimen que nada tiene que ver con el presidente Calderón y su gobierno, más valdría que se aclarara pronto y se informara con transparencia de las investigaciones.
Si en caso contrario, hay algún tipo de mensaje en esa ejecución, también debería informarse; ni el país ni el Presidente están para resistir especulaciones y suspicacias sobre un tema tan delicado.
Notas indiscretas. Si Los Chuchos le declararon la guerra a Marcelo Ebrard y a sus aspiraciones futuras con el desaire a su gabinete, algo salió mal en la estrategia de los líderes de Nueva Izquierda. Al romper con Ebrard , intentaban confirmar su supremacía de corriente dominante en el PRD. Pero lo ocurrido ayer en la elección del perredismo capitalino demuestra que Jesús Ortega y Carlos Navarrete no calcularon bien el efecto de su ruptura con Marcelo . El triunfo de Ricardo Ruiz y Carlos Reyes Gámiz , como presidente y secretario del PRD-DF, indica que Ebrard hizo alianza con Alejandro Encinas y así derrotó a los candidatos de Nueva Izquierda, que no mostraron la fuerza que pregonan sus dirigentes. Lo dicho: en el PRD comenzó la lucha por el 2012. Los dados repiten Serpiente. Parece mala racha.
© 2006 Copyright El Universal-El Universal Online
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Serpientes y Escaleras
Salvador García Soto
El Universal
Jueves 14 de diciembre de 2006
¿Quién mató al primo del Presidente?
Si fue obra del azar, es una casualidad macabra; si fue algo más ya veremos si se puede saber con las investigaciones, pero por ahora la ironía y la paradoja rodean al crimen del pariente de la familia presidencial, Felipe Zavala McGregor . La ejecución a mansalva del primo de la esposa de Felipe Calderón se produjo justo cuando el Presidente ha hecho del combate al crimen organizado y a la violencia, la mayor bandera del arranque de su sexenio.
De hecho, ayer, cuando a Calderón le dieron la noticia de que habían encontrado el cuerpo sin vida de su primo político, acababa de pronunciar un discurso en Huehuetoca, estado de México, donde volvió a advertir que su gobierno no dudará en aplicar "toda la fuerza del Estado" contra los criminales. El rostro del mandatario no pudo evitar una expresión de azoro cuando le comunicaron de la ejecución.
Al enterarse del asesinato, el primer mandatario estaba flanqueado por el secretario de Defensa, Guillermo Galván, por el de la Marina, Mariano Francisco Saynes, y por el titular de la PGR, Eduardo Medina Mora. Acababan de anunciar que 10 mil militares fueron transferidos a la Policía Federal Preventiva para reforzar el combate a la inseguridad y a la criminalidad, y apenas unas horas antes, Felipe Zavala era ejecutado por sus homicidas.
Anoche, en la Procuraduría de Justicia del Estado de México habían descartado el robo o, incluso, el secuestro como móvil del crimen. Zavala McGregor distribuía gas a hoteles en la zona de Naucalpan y Tlalnepantla. Las primeras declaraciones de sus familiares negaban que tuviera enemigos, o que estuviera involucrado en conflictos de cualquier tipo.
En las primeras indagatorias, el subprocurador mexiquense Carlos Flores confirmó la ejecución: el cuerpo de Felipe Zavala estaba arrodillado, en la parte trasera de su camioneta, con tres balazos de un arma calibre 9 milímetros. No desaparecieron pertenencias de valor, ni hubo avisos de secuestro.
No es común en este país de larga tradición presidencialista, que un pariente tan cercano a la familia que habita en Los Pinos, aparezca ejecutado. Las indagatorias dirán si el crimen tiene conexión política, o si el primo político del presidente Calderón fue una más de las miles de víctimas que todos los días ejecuta la delincuencia en este país.
Por ahora, hay detalles de este caso que nos recuerda a otro asesinato reciente y ligado a otro apellido presidencial: el de Enrique Salinas de Gortari, también asesinado y su cuerpo abandonado en un municipio del estado de México. Aquel crimen, ocurrido el 6 de diciembre de 2004, también fue investigado por la PGJEM. Hasta la fecha no han concluido las investigaciones y es claro que la decisión fue, desde el principio, borrar evidencias y ocultar la verdad sobre ese crimen.
Veremos si con el asesinato del primo de Margarita Zavala no estamos ante un caso que terminará también enredado y sin esclarecerse. Si fue un crimen que nada tiene que ver con el presidente Calderón y su gobierno, más valdría que se aclarara pronto y se informara con transparencia de las investigaciones.
Si en caso contrario, hay algún tipo de mensaje en esa ejecución, también debería informarse; ni el país ni el Presidente están para resistir especulaciones y suspicacias sobre un tema tan delicado.
Notas indiscretas. Si Los Chuchos le declararon la guerra a Marcelo Ebrard y a sus aspiraciones futuras con el desaire a su gabinete, algo salió mal en la estrategia de los líderes de Nueva Izquierda. Al romper con Ebrard , intentaban confirmar su supremacía de corriente dominante en el PRD. Pero lo ocurrido ayer en la elección del perredismo capitalino demuestra que Jesús Ortega y Carlos Navarrete no calcularon bien el efecto de su ruptura con Marcelo . El triunfo de Ricardo Ruiz y Carlos Reyes Gámiz , como presidente y secretario del PRD-DF, indica que Ebrard hizo alianza con Alejandro Encinas y así derrotó a los candidatos de Nueva Izquierda, que no mostraron la fuerza que pregonan sus dirigentes. Lo dicho: en el PRD comenzó la lucha por el 2012. Los dados repiten Serpiente. Parece mala racha.
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